Palermo, 16 de febrero de 2024 - Hoy en la sala de audiencias del Tribunal de Palermo, el actual Ministro del Interior, Matteo Piantedosi, ha declarado como testigo de la defensa durante una nueva audiencia en el proceso contra Matteo Salvini, acusado de secuestro y omisión de actos oficiales en relación a la prohibición del desembarco de 163 personas en el puerto de Lampedusa en agosto de 2019.

Piantedosi, quien en ese momento era Jefe de Gabinete de Salvini, ha hecho una serie de afirmaciones que generan preocupación. Ha afirmado que la decisión de no otorgar el Permiso para Operaciones de Desembarque (POS) a las personas rescatadas a bordo de nuestro barco fue puramente política. Reiteró varias veces que fue la dirección política marcada en ese momento por el entonces Ministro del Interior, Matteo Salvini, lo que provocó el bloqueo en el mar que obligó a 163 personas a esperar 20 días antes de que se reconocieran sus derechos. Todo ello, independientemente de las Convenciones Internacionales que regulan el rescate en el mar, convenciones que el Ministro Piantedosi parecía no recordar.

También declaró que el objetivo de impedir el desembarco era reafirmar el principio según el cual la jurisdicción y competencia del rescate y desembarco correspondían al país de bandera del barco, algo que rechaza el derecho internacional y que, al parecer, el Ministro desconocía.

Durante su testimonio, también ha hecho hincapié en el papel desempeñado por Libia, un país que supuestamente "respeta las normativas internacionales y puede llevar a cabo actividades legítimas de búsqueda y rescate en el mar". Todo ello a pesar de las graves violaciones a los derechos humanos certificadas por organismos internacionales como la ONU, que han hablado de "violencias inenarrables" perpetradas dentro de los campos de detención libios, campos sobre los cuales el Ministro parecía no tener conocimiento, al igual que desconocía la prohibición expresa de la Convención de Ginebra de las “devoluciones en caliente".